Meditación 1
Meditación 2
Una herencia escogida
Mictam de David
1 Guárdame, Dios,
porque en ti he confiado.
2 Alma mía, dijiste a Jehová:
«Tú eres mi Señor;
no hay para mí bien fuera de ti.»
3 Para los santos que están en la tierra
y para los íntegroses toda mi complacencia.
4 Se multiplicarán los dolores de aquellos
que sirven diligentes a otro dios.,
No ofreceré yo sus libaciones de sangre
ni en mis labios tomaré sus nombres.
5 Jehová es la porción de mi herenciay de mi copa;
tú aseguras mi suerte.
6 Las cuerdas me cayeronen lugares deleitosos
y es hermosa la heredadque me ha tocado.
7 Bendeciré a Jehová que me aconseja;
aun en las noches me enseña mi conciencia.
8 A Jehová he puesto siempre delante de mí;
porque está a mi diestra,no seré conmovido.
9 Se alegró por tanto mi corazóny se gozó mi alma;
mi carne tambiéndescansará confiadamente,
10 porque no dejarás mi alma en el seol,
ni permitirás que tu santovea corrupción.